Derbi andaluz.

En la tarde/noche de mañana, se jugará uno de los derbis más apasionantes de la liga española. La cita tiene lugar a las 21:00 en el Sanchez Pizjuan. Dos equipos. Dos colores. Dos pasiones. Una ciudad que se tiñe de roja o verdiblanca. Sevilla-Betis. Casi nada. Buena manera de despedir un finde que, de momento, nos ha dejado anécdotas como el gol de Giroud al Soton o el partidazo entre el Everton y el Liverpool (3-3).

Los de Emery no están haciendo un buen arranque de temporada. Se sitúa en la mitad de la tabla. Su juego está en forma ascendente. Cada vez va a mejor. Gran culpa de todo esto la tiene Ivan Rakitic. El croata está cuajando la mejor campaña de su carrera deportiva de largo. Lleva 11 goles contando Liga y Europa League. Es el líder del vestuario. El ídolo del sevillismo, que últimamente es a lo único que se puede aferrar por la mala situación del equipo.

Si hablamos de una situación del club rojiblanco, del equipo de Pepe Mel, podemos hablar de tragedia. Van últimos. A tres puntos del 17º -Valladolid-. Su juego es muy pobre. La marcha de Beñat al Athletic este mercado de verano ha dejado marcado al equipo. La llegada de Verdú no ha sido suficiente. Además, como recientemente ha declarado el técnico verdiblanco, sus dos estrellas del equipo, Rubén Castro y Jorge Molina, no van a jugar de inicio. Esto se debe al mal nivel que están teniendo en este inicio de temporada. Al contrario del puesto de Emery, el de Pepe Mel no peligra, según ha dicho su presidente. El puesto del vasco, en cambio, sí peligra. La razón por la que el puesto del entrenador bético no peligre es muy simple. Se le está dando la confianza que él ha demostrado durante sus años en el club.

Aún y todo, no nos podemos confiar en que vaya a ser un partido fácil para el Sevilla. Ni mucho menos. Hay que acordarse, que la temporada pasada, El Betis, le endosó un 5-1 al Sevilla. A parte, es un derbi y en un partido de este tipo, no hay predicciones que valgan.

Firmado: M11